Marilyn - En Persona (Nueva York)

Fue un gran placer haberla conocido y por permitirme haber pasado la mejor HORA de mi vida con usted. Una vez entre por las puertas de su hogar sentí una paz y tranquilidad, aunque un poco nerviosa la cual era obvió por la ocasión. Fue una experiencia inolvidable. El haber podido escuchar de mis seres queridos desde el más allá por medio de el don o el regalo que Dios le dio a usted es increíble.

Lo mas increíble es su HUMILDAD y aún más la transparencia que usted emana. Esperando con ansias poder verla nuevamente pero esta vez junto con mi esposo. Declarando bendiciones, salud, paz y prosperidad para usted y si familia.

Gracias por la oportunidad y por sus consejos, los cual llevó bien presentes. Con mucho cariño y respeto,

Marilyn